Sagradas Imágenes
















La imagen de Nuestro Padre Jesús Cautivo es obra del Ilustre Imaginero sevillano D. Antonio Castillo Lastrucci. Fue elaborada en el año 1953 y bendecida por el entonces Párroco D. Manuel Camacho el 27 de Noviembre del mismo año.

En la reciente publicación de Ediciones Tartessos, dirigida por Enrique Pareja López, del libro titulado Antonio Castillo Lastrucci, en Febrero de 2010, aparece la siguiente cita sobre la imagen de Ntro. Padre Jesús Cautivo de Casariche:

A.P.P.D.S., Libro de cuentas de Antonio Castillo Lastrucci f.46v. ¿8? de abril de 1953. Se pagaron 7.000 pts por el Cautivo, 2.000 de ellas a cuenta. Ángel Gómez Nieto fue quien encargó la obra.
Madera de cedro policromada 1´69 m. de alto, más 0,11 m. de la peana. Año 1953.”

      

La Imagen de Nuestra Señora de los Dolores corresponde, al igual que la de Nuestro Padre Jesús Cautivo, al imaginero hispalense D. Antonio Castillo Lastrucci. Como se ha mencionado anteriormente, en la reciente publicación de Ediciones Tartessos, , también aparece la siguiente cita sobre la imagen de Nuestra Madre:


Imagen de candelero para vestir. 1'59 m de alto. Año 1937. A.P.P.D.S. Libro de cuentas de Antonio Castillo Lastrucci, f. 9v 9 de agosto de 1937. El precio de la imagen mariana fue de 1.250 pts. Entregándose 500 por adelantado.”



Fue elaborada en madera de cedro policromada y bendecida en el año 1937, tras la desaparición de la antigua imagen (talla en madera de la escuela granadina del siglo XVII) en los sucesos acontecidos en nuestro pueblo durante la Guerra Civil española. De la antigua imagen sólo se conservan un juego de manos en posición de oración.  



En un principio, el autor elabora la imagen incluyendo las manos juntas en posición de oración que se conservaron de la anterior imagen y, posteriormente, en el año 1941, elabora por encargo de la Hermandad unas nuevas manos (ya separadas), pues desde el primer momento no se estaba demasiado de acuerdo con el diseño original de Castillo Lastrucci. 

Dichas manos, por haberse elaborado dos años más tarde y sin que el autor contase en ese momento con la Imagen en su taller, comete el error de no dar la misma tonalidad en la policromía, defecto que se subsana en la restauración que D. Manuel Tobaja Villegas realiza en el año 1988 en Sevilla.

D. Enrique Gutiérrez Carrasquilla (año 2010-2011) interviene a la Imagen en dos líneas de actuación: cambio y fijación de su encarnadura y limpieza de policromía.








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